Tras conseguir 1.700 millones de dólares de inversores privados, la popular ‘app’ de mensajería Telegram ha cancelado su muy publicitada ICO, la cual se preveía que iba a batir todos los récords en cuanto a recaudación de fondos y a convertirse en la mayor oferta inicial de monedas digitales de la historia.
Citando una fuente anónima cercana al proyecto, The Wall Street Journal informaba esta semana que Telegram recaudó el dinero vendiendo su recién creada criptodivisa a algo menos de 200 inversores privados. La compañía utilizará los fondos para su ambicioso proyecto Telegram Open Network (TON), una plataforma basada en tecnología ‘blockchain’ que ampliará las posibilidades de la ‘app’ de mensajería, convirtiéndola en una solución de pagos, almacenamiento de archivos, navegación por Internet a prueba de censura y ‘apps’ descentralizadas.
Logo de Telegram. Fuente: telegram.org
El ‘libro blanco’ original del proyecto de Telegram dibujaba un plan de recaudación de 1.200 millones de dólares a través de inversores privados invitados y una venta abierta al público. Por el momento, la compañía fundada por los hermanos Pável y Nikolái Dúrov no ha realizado declaraciones oficiales sobre la cancelación de su ICO.
¿A qué se debe la decisión de Telegram?
Según Bloomberg, la respuesta obvia es que la compañía ya cuenta con suficientes fondos recaudados, pero la cancelación de la ICO de Telegram se produce en medio de un clima de intenso escrutinio sobre las ICO por parte de los reguladores estadounidenses, por lo que la decisión también puede leerse en clave de minimización de riesgos.
Spencer Bogart, socio en Blockchain Capital, comenta:
«Desde una perspectiva regulatoria, creo que una venta pública es considerablemente más riesgosa para Telegram que una venta privada. Teniendo en cuenta las cantidades recaudadas por Telegram vía la venta privada, realmente no hay necesidad de incurrir en el riesgo adicional de una venta pública».
TechCrunch afirma que el proceso de venta ha sido «desordenado» y señala que el proyecto de ICO ha sido duramente criticado desde el principio por su ambigüedad.
En muchos sentidos, el proceso de recaudación de fondos de Telegram va en contra de uno de los supuestos principios básicos de las ICO: democratizar las inversiones.
Erik Voorhees, fundador y CEO de la casa de cambio de criptomonedas ShapeShift, declaró en Twitter que los reguladores estadounidenses han generado «un entorno donde sólo los ricos (también conocidos como ‘inversores acreditados’) pueden acceder a acuerdos financieros. Los plebeyos deben atenerse a la lotería».
Fuentes:
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