Apple, Google, Oracle, Cisco, Yahoo!, LinkedIn, WhatsApp, Airbnb, Dropbox… Sequoia Capital es el motor de búsqueda de Silicon Valley para generar innovación… y millonarios.
Este fondo de capital riesgo ha hecho ricos tanto a sus directivos como a los emprendedores a quienes ha financiado.
Los principios: trabajo, discreción y austeridad
Al entrar en las espartanas oficinas de Sequoia en Silicon Valley se puede ver qué sucede cuando un grupo de perfeccionistas hambrientos como Leone -socio director del fondo de capital riesgo- deciden trabajar en equipo.
Los socios de Sequoia no tienen oficinas lujosas y comparten un espacio común, las salas de conferencia tienen papeleras de plástico y los archivos de las salidas a Bolsa históricas se exhiben en marcos de dudosa calidad. La austeridad forma parte de su ADN.
El método: la selección de las propuestas
Sequoia recibe unas 200 propuestas al mes de empresas que inician su negocio. Generalmente financian sólo dos. Además, en torno al 60% de los proyectos financiados por Sequoia fueron iniciados por, al menos, un emprendedor extranjero.
Independientemente de si reciben un Sí o un No por respuesta, los fundadores de las empresas que intentan hacer negocio con Sequoia describen su hora de entrevista como una de las experiencias más intensas de sus vidas.
Tony Zingale, experimentado ejecutivo de Silicon Valley, recuerda una reunión en los 90 con Leone: «cogió mi curriculum, lo tiró sobre el escritorio y mostrándome los dientes me dijo: «¿Qué sabes tú sobre cómo dirigir un proyecto emprendedor?».
Discutimos durante 10 minutos hasta que finalmente me dijo: «Ok, ahora sabemos que eres inteligente. Ya podemos dar comienzo a esta reunión«. Hoy Zingale es CEO de Jive Software, un proveedor de software empresarial/social financiado por Sequoia.
El tiempo es oro
Parte del gusto de Sequoia por los emprendedores proviene de su deseo de hacer progresar rápidamente a los mejores.
Un emprendedor con un buen proyecto puede reunirse con Sequoia un lunes por la mañana, explicarles su proyecto de negocio y, si todo va bien, esa misma tarde pueden estar acordando el contrato de financiación.
Entre los fans de la velocidad de Sequoia se encuentran Elon Musk, CEO de Tesla Motors. Musk recuerda que en 1999, cuando estaba creando lo que después sería PayPal, Sequoia le hizo una transferencia por 5 millones de dólares para que lanzara el negocio, aun antes de que los abogados terminaran con todos los aspectos del contrato.
Éxitos de Sequoia
Desde su fundación en 1972, Sequoia Capital ha respaldado lanzamientos de empresas que actualmente controlan la impresionante cifra de 1,4 billones de dólares en valor de mercado bursátil conjunto, equivalente al 20% del índice Nasdaq.
La lista de éxitos comienza con la salida a Bolsa (OPA) de Apple en 1980 e incluye las de Oracle, Cisco, Yahoo!, Google, LinkedIn, Airbnb, Dropbox, FireEye, Palo Alto Networks, Stripe, Square y WhatsApp. Todos son hijos de Sequoia.
Sequoia Capital está convirtiendo a sus socios en multimillonarios y dejando perplejos a los inversores que apuestan por otros fondos.
Pero Sequoia no siempre acierta
Las pérdidas en inversiones son parte del juego.
Durante el auge de las puntocom de 2000, Sequoia tuvo grandes pérdidas en empresas como eToys y Webvan, una tienda de comestibles online. También perdió 25 millones de dólares con Color, una app de fotografía que terminó vendiendo a Apple.
También las oportunidades perdidas son recurrentes cuando se analizan tantos proyectos.
El peor desacierto ocurrió en 2006, cuando Mark Zuckerberg, fundador de Facebook, provocó a Sequoia, llegando tarde a una reunión y vistiendo pantalones estilo pijama, para presentarles un excéntrico negocio paralelo llamado Wirehog.
Una vez hecho el desaire, Zuckerberg logró el acuerdo de financiación con Accel Partners, en un acuerdo que supuso a la empresa de capital riesgo una recompensa del 300%. Hoy las relaciones con Facebook se han arreglado. Desde 2012, la gran red social ha pagado cifras importantes por dos empresas financiadas por Sequoia: Instagram y WhatsApp.
Otra importante oportunidad perdida ocurrió en 2007, cuando Jack Dorsey ofreció a Sequoia una participación del 10% en Twitter y la incipiente red social estaba valorada en apenas 20 millones de dólares, estando hoy su capitalización de mercado en 11.000 millones.
Inversiones de Sequoia Capital en Fintech
Conocer dónde invierte Sequoia Capital es una referencia para multitud de inversores.
Según Fintechnews Switzerland, Sequoia es el segundo principal inversor en Fintech de todo el planeta, destacando inversiones en empresas como Paypal, Square (de Jack Dorsey), Prosper, Yodlee, Green Dot Corporation, Capital Float, ClearTax, WeLab, Nubank, PPDai, Personetics Technologies, Omni Prime Inc., QFPay, String y 19pay.
Pero más significativo aún es que se encuentra entre los 10 principales inversores de Fintech en Asia, aunque con distintos enfoques.
Mientras que Sequoia Capital China ha invertido en Futu5, una plataforma de trading, y en Noah Yijie, un gestor financiero de patrimonios, Sequoia Capital India ha invertido en Equitas, una entidad de microcréditos, en India Shelter Finance, que concede financiación para la adquisición de viviendas, y en Ujjivan, una entidad que ofrece servicios financieros a las personas más desfavorecidas económicamente.