Uno de los segmentos más rentables del sector financiero tradicional, la Banca Privada, se enfrenta a nuevos competidores como Wealthfront, Betterment, SigFig y Future Advisor que prestan servicios de alta calidad y bajo coste.
Los servicios de estos nuevos operadores tienen 8 claras señas de identidad.
Servicios más baratos
Mientras que las comisiones tradicionales de gestión y depósito de valores oscilan entre el 0,8-1% del volumen de activos gestionados, estas empresas han reducido el coste medio a un rango entre el 0,35-0,5%.
Tampoco se cobran comisiones por cada operación realizada, práctica habitual en los servicios de las grandes entidades bancarias. En particular, incluso Wealthfront gestiona los primeros 10.000 dólares de forma gratuita.
Orientación al móvil
La relación presencial en lujosas oficinas en el centro de la ciudad y una comunicación mensual por correo ordinario que llega al inversor con 15 días de retraso es sustituida por una información y asesoramiento continuado en tiempo real y accesible desde cualquier lugar a través del teléfono móvil.
Transparencia
Tanto el precio de los servicios como los equipos gestores son claramente visibles a través de las web corporativas.
El servicio tradicional de Banca Privada se caracteriza por el secretismo y la opacidad, incluso por operar en paraísos fiscales que escapan a los mínimos controles financieros.
Independencia
Al no realizar otras actividades de intermediación financiera, se minimizan los conflictos de intereses entre los objetivos de comercialización de los productos de la entidad bancaria y las preferencias de sus clientes.
Los denominados robots asesores o roboadvisors, basados en el aprendizaje automático y los big data, presentan como principal ventaja la adaptabilidad a las preferencias del inversor y la ausencia total de conflictos de interés.
Accesibilidad
Mientras que únicamente los patrimonios superiores a 2-3 millones de dólares pueden optar a los servicios Premium de gestión de activos (mediante carteras o vehículos tipo sicav), Wealthfront ofrece asesoramiento y herramientas de control de sus inversiones a los clientes desde una cuenta mínima de 5.000 dólares.
Hibridación
Los equipos de estas empresas suelen estar formados por ex-operadores financieros de Wall Street e ingenieros / informáticos de Silicon Valley.
La hibridación de conocimientos ofrece claras ventajas competitivas como la capacidad de respuesta ante innovaciones disruptivas.
Juventud
La crisis financiera internacional ha mermado considerablemente la credibilidad de la banca tradicional.
Los nuevos operadores se quieren desprender de esa imagen de banqueros de Wall Street con trajes caros y sin escrúpulos, apostando abiertamente por una nueva generación, más joven, más cercana y menos contaminada.
Se fomenta la imagen de «equipo» frente a las estructuras «jerarquizadas» de los grandes bancos.
Globalización y redes sociales
Los equipos incorporan a personas de distintas nacionalidades, estadounidenses, indios, japoneses, europeos… acorde con el diseño de un servicio global que no conoce fronteras.
El conocimiento de las redes sociales y su evolución también son aspectos que destacan en una estrategia dinámica y escalable.
Resulta llamativo que ninguna de las diferencias entre los nuevos operadores y la Banca tradicional haga referencia a riesgos o rentabilidades.
Hoy en día, las estrategias en la gestión de activos son muy similares: diversificación mediante fondos de inversión y rentabilidades medias controladas. Nadie arriesga porque se perdería la protección de poder «echarle la culpa a otro».
En conclusión, principios muy claros que no afectan a las variables principales de una inversión (riesgo y rentabilidad) sino a diferencias cualitativas y de estrategia que van a poner en serios aprietos a la acomodada Banca Privada de los bancos tradicionales.