Encontramos tres grandes causas que explican el imparable crecimiento del Ecosistema Fintech:
- La globalización.
- La crisis financiera.
- La innovación tecnológica.
Globalización
No se trata de un fenómeno reciente, pero sus efectos sobre los diferentes sectores económicos no han avanzado a la misma velocidad. En relación con el sistema financiero, destacamos los siguientes motores de desarrollo del Ecosistema Fintech: el comercio electrónico, la mejora del binomio calidad-precio y los millennials.
En la economía digital, el desarrollo del comercio electrónico y las elevadas comisiones de los medios de pago tradicionales (Visa, Mastercard y American exprés) han posibilitado la aparición de nuevos operadores mucho más baratos, como Square, Apple Pay, Paypal o incluso Bitcoin.
Por otro lado, el aumento de la competencia y la reducción de márgenes en cualquier actividad económica y financiera son consecuencias directas de la globalización, provocando una especial sensibilidad de los agentes económicos al binomio calidad-precio de los productos y servicios financieros. La reducción de los costes de estructura de la Fintech, las soluciones en tiempo real desde los smartphones y el proceso de simplificación de los procesos (usabilidad) han mejorado significativamente sobre este binomio.
Por último, la llegada a la edad financiera de la generación denominada «millennials», con edad comprendida entre 18 y 34 años, nativos digitales que han crecido con internet y los smartphones.
Crisis financiera
La crisis financiera internacional ha tenido tres grandes consecuencias en la mayoría de los países desarrollados: desconfianza generalizada, restricción crediticia y reducción del negocio bancario.
Los detonantes de la crisis financiera evidenciaron enormes errores y problemas tanto de regulación como de supervisión bancaria: activos tóxicos, conflictos de interés, ineficiencia en la coordinación internacional en los planes de rescate, riesgo moral, paraísos fiscales, bonus millonarios… una la lista larga y de muy difícil solución. En estos años, los ahorradores perdieron la confianza en las entidades bancarias tradicionales… y aún no la han recuperado.
Además, durante los años de bonanza todas las economías se sobreendeudaron y con la crisis financiera se inició un proceso de desapalancamiento de tanto bancos como empresas, familias y gobiernos. Los últimos años se han caracterizado por la restricción crediticia por insuficiencia tanto de capital disponible por parte de los bancos como de una demanda solvente de empresas, familias… y gobiernos.
Por último, durante la crisis financiera el negocio bancario ha perdido mucha rentabilidad por los siguientes motivos:
- La recesión económica disminuyó el volumen de operaciones realizadas.
- Las operaciones vivas fueron contratadas en los años previos a la crisis en un entorno de altísima competencia y, por tanto, con un margen muy pequeño.
- Las necesidades de liquidez encarecieron la captación de depósitos bancarios.
- Los costes de estructura estaban sobredimensionados, tanto en oficinas como en personal.
En este contexto, la crisis financiera ha impulsado el crecimiento de las Fintech por los siguientes motivos.
1.- La atracción de capital humano y talento. La «desaparición» de la banca de inversión tras la caída de Lehman Brothers (septiembre de 2008) produjo un primer éxodo de profesionales de la banca hacia el sector tecnológico.
Posteriormente, la reducción de los costes de estructura de los bancos comerciales también provocó un segundo éxodo de profesionales financieros hacia el Ecosistema Fintech.
En la actualidad, las Fintech están de moda y los estudiantes de las mejores escuelas de negocios del ámbito financiero ya no quieran fichar por Goldman Sachs o Citygroup, sino por Apple, Square o incluso “saltar al vacío” y crear su propia empresa.
2.- Búsqueda de fuentes alternativas de inversión y financiación. Actualmente, los activos financieros tienen muy poco atractivo porque ofrecen bajas rentabilidades y existe una enorme volatilidad en los mercados financieros. Por este motivo, dos tipos de activos han captado la atención de los inversores: los inmobiliarios y las startups.
Por último, la restricción crediticia durante tantos años ha obligado a las empresas a buscar nuevas vías de financiación como el crowdfunding.
Innovación tecnológica
Dos importantes factores han hecho que los bancos sean hoy más vulnerables desde la óptica tecnológica: los teléfonos inteligentes y el abaratamiento del procesamiento de datos que ha reducido las barreras a la entrada.
Inicialmente, las innovaciones fueron protagonizadas por «pequeñas» empresas tecnológicas y cabía la posibilidad de que los grandes bancos tradicionales las adquirieran como mecanismo de defensa ante este «intrusismo», pero la involucración de las grandes empresas tecnológicas (Google, Apple, Amazon y Facebook) en el sector financiero ha cambiado el escenario por los siguientes motivos:
- Porque ha acelerado la transformación del sistema financiero.
- Porque representa una amenaza real para el lobby bancario, y
- Porque ha revalorizado a las soluciones Fintech de tamaño pequeño y mediano.
En la actualidad, la mayor parte de la innovación financiera sucede fuera de la industria bancaria, en áreas como la inteligencia artificial, el big data o la seguridad, pero se incorpora con suma rapidez al Ecosistema Fintech.
Pero no hay ningún favorito real. Los gigantes tecnológicos puedan “asustar” inicialmente, pero las sinergias entre las Fintech y las entidades bancarias tradicionales son enormes y las posibilidades de colaboración infinitas… si aprenden un lenguaje común y se esfuerzan por entenderse.